En el año 2021 se produjeron 921 siniestros mortales en accidentes de tráfico, en los que fallecieron 1.004 personas y otras 3.728 resultaron heridas graves. De la cifra de fallecidos, el 38% fueron usuarios vulnerables (peatones, ciclistas, motoristas y usuarios de vehículos de movilidad personal). Dentro de ese porcentaje, 110 fueron peatones.
Es evidente que los peatones son la parte más vulnerable cuando se produce un accidente de tráfico. Se contempla una indemnización para este tipo de situaciones, aunque, muchas veces, las víctimas desconocen su derecho a reclamar un atropello y solicitar una indemnización. Si por desgracia has sufrido un atropello o conoces a alguien que le haya pasado, lo más recomendable es que te pongas en manos de profesionales expertos en la materia. Existen abogados de reclamación de indemnizaciones por atropellos que solo cobran cuando ganan y tantos las consultas como las visitas son gratuitas. Te ayudarán a reclamar ese atropello y recibirás la indemnización que te corresponde.
Cómo reclamar un atropello
Reclamar un atropello es relativamente sencillo, salvo que sea posible demostrar que la responsabilidad es exclusiva del peatón. En ese caso, es muy difícil conseguir una indemnización, o bien la misma se vería reducida. Sea como fuere, lo mejor es estar asesorado por un abogado experto en atropellos.
Si se produce un atropello, lo fundamental es dar atención médica a las víctimas. A continuación, habría que tomar la información del vehículo (matrícula, modelo, datos del conductor, etc.). En el supuesto de que se persone la policía, levantarán un atestado policial (este documento es de gran importancia porque supone una prueba fundamental en el caso de que se llegue a juicio).
Es fundamental acudir al médico, aunque no haya lesiones graves, puesto que se levantará un informe donde quedará constancia del accidente y se hará una evaluación física al lesionado. Se debe acudir a urgencias lo antes posible, el tiempo máximo establecido para la atención de lesiones a víctimas de accidentes de tráfico es de 72 horas. Si no acuden en ese plazo, podrían perder su derecho a reclamar una indemnización.
A mayores, la víctima tiene que revisar sus pertenencias, y los daños materiales causados en el atropello puesto que en la reclamación no solo se cubren los gastos físicos o psíquicos sino también los materiales.
El procedimiento para reclamar por atropello comienza con una reclamación por parte de la víctima o de su abogado ante la aseguradora. Poniendo en conocimiento los daños sufridos. La compañía tiene un plazo de 3 meses para emitir una oferta motivada.
Si no se llega a un acuerdo, comienzo la vía judicial. La víctima presentará demanda en los juzgados contra la compañía de seguros y un juez decidirá en última instancia.
¿Cómo se calcula la indemnización?
La indemnización por atropello a un peatón puede englobar distintos conceptos:
- Daños físicos, morales, estético: se valoran por un médico mediante un informe.
- Daños materiales: los daños sufridos en los objetos que se portaban en el momento del atropello (móvil, reloj, bolso, etc.).
- Las secuelas físicas y/o psicológicas de esos daños derivados del accidente y que supongan limitaciones en la vida de la víctima.
- La merma en la economía de la víctima, y que vendrá determinada por el tiempo que durante su recuperación no ha podido trabajar o atender su negocio. Por ejemplo, en los casos que tenga que estar de baja laboral.
Todos estos elementos se tienen que tener en cuenta a la hora de calcular y reclamar la indemnización por atropello.
La indemnización se calcula de acuerdo con la Ley 35/2015, de 22 de septiembre, de reforma del sistema para la valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación y en base al baremo de accidentes de tráfico:
- Perjuicio personal básico 32,91 €
- Perjuicio personal particular de tipo moderado 109,70 €
- Perjuicio personal particular de tipo grave 82,28 €
- Perjuicio personal particular de tipo muy grave 57,04 €
También se tiene que tener en cuenta la situación personal y profesional del lesionado, así como el efecto que provoca en su vida y en su desempeño laboral sus lesiones. Y, a mayores, las secuelas que se cuantifican en puntos y cada punto tiene una valoración.
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