Cuando decides y sobre todo puedes iniciar los trámites para comprar una casa, en lo que menos te percatas es en los seguros que el banco te invita a contratar o incluso te obliga para poder firmar una hipoteca.
Debemos tener en cuenta que un seguro de vida se trata de un servicio adicional, pero no obligatorio. Los bancos no pueden obligar a los clientes a contratar estos seguros, y optar por alternativas puede resultar significativamente más beneficioso desde el punto de vista económico.
Los bancos no pueden imponer la contratación de seguros de vida como requisito para acceder a servicios financieros
Los usuarios tienen la libertad de elección, de hecho las hipotecas vinculadas a este tipo de servicios pueden encarecer la operación. Además. hay que tener en cuenta, que la mayoría de las veces, el banco no te deja tiempo para «pensar» o estudiar las condiciones de ese seguro y se contrata por inercia.
La legislación es clara en cuanto a la libertad de elección de los usuarios. Los bancos no pueden imponer la contratación de seguros de vida como requisito para acceder a servicios financieros, como hipotecas.
¿Qué esconden los seguros de vida bancarios?
Un aspecto crucial que los usuarios deben tener en cuenta es que los seguros de vida ofrecidos por los bancos pueden ser hasta un 80% más caros en comparación con las opciones disponibles en el mercado.
Esta disparidad de precios se debe a diversos factores, como comisiones adicionales y la falta de competencia directa en el sector bancario. Contrariamente a la creencia común, no es obligatorio contratar el seguro de vida ofrecido por el banco al adquirir una hipoteca.
¿Y qué ocurre con las hipotecas vinculadas?
En primer lugar vamos a ver qué es una hipoteca vinculada. El banco condiciona la concesión del préstamo a la contratación de productos adicionales, como seguros de vida.
Te lo pueden vender como una oportunidad, pero a largo plazo puede resultar costosa. La falta de competencia y la imposición de condiciones pueden llevar a los usuarios a pagar más por servicios que podrían obtener de manera más económica fuera del entorno bancario.
Lo más recomendable es buscar alternativas fuera del banco al contratar seguros de vida u otro tipo de seguros, como por ejemplo con un comparador de seguros de vida. Al hacerlo, se abre la puerta a una gama más amplia de opciones, con la posibilidad de seleccionar aquella que mejor se adapte a las necesidades y presupuesto del cliente. Contratar directamente con las compañías de seguros puede resultar en ahorros significativos a lo largo del tiempo.
Debemos tener claro que en base a la Ley 5/2019 reguladora de los contratos de crédito inmobiliario, establece que un banco solo puede obligar al cliente a contratar tres productos junto a la hipoteca:
- una cuenta para pagar las cuotas,
- un seguro de daños sobre el inmueble hipotecado (con la cobertura mínima por siniestros)
- y otro seguro “en garantía del cumplimiento de las obligaciones del contrato”, que podría ser uno de vida o de protección de pagos.
Es decir, te puede condicionar a que tengas estos tres productos para darte la hipoteca, pero lo que no puede hacer es obligarte a contratar los seguros con su compañía aseguradora sino que tienes libertad y además la hipoteca no se puede encarecer por firmar esas pólizas obligatorias con otra empresa.
Los seguros de vida y hogar son importantes para proteger a los clientes y sus hogares. Sin embargo, es importante asegurarse de que no estar pagando más de lo necesario por estos seguros. Se puede ahorrar dinero si se comparan los precios de los seguros y se negocia con los bancos para obtener mejores condiciones, al final vas a tener una larga relación con tu banco y tienes derecho a mirar por tus intereses igual que hacen ellos.
Deja una respuesta