En primer lugar, para poder ser abogado penalista, o simplemente abogado tienes que contar con los siguientes requisitos:
- Ser Graduado en Derecho
- Realizar el Máster de Acceso a la Abogacía que te permite realizar y superar el examen de acceso de esta profesión que convoca cada año el Ministerio de Justicia.
- Colegiarse como abogado ejerciente en el Colegio de Abogados que se elija.
Si cumples estos tres requisitos, puedes empezar a ejercer como abogado. Pero todo joven abogado sabe que los inicios son duros y tras los estudios se necesita práctica y especializarte. Si te llama la atención el derecho penal y el derecho procesal penal, es muy recomendable que realices algún máster relacionado con esto, por ejemplo si quieres ser abogada experta en delitos sexuales, a mayores del Máster de Acceso a la Abogacía sería conveniente que realizaras unos estudios más específicos dentro de la rama de Derecho Penal o incluso plantearte el doble grado de Derecho y Criminología o un máster de psicología criminal.
Cuánto más sepas del tema, mejor abogado serás. Un abogado, en este caso penalista, tiene que estar continuamente estudiando y aprendiendo.
Por lo tanto, un abogado penalista está especializado en la rama penal del Derecho. Es la rama donde se regulan los delitos y sus penas, así como el procedimiento legal de los mismos. Es fundamental conocer el Derecho Penal y sobre todo el derecho procesal penal. Un buen abogado penalista tiene que controlar muy bien las normas procesales en su día a día.
Lugar de trabajo de un abogado penalista
Dentro de la abogacía hay distintas maneras de ejercerla, por ejemplo por cuenta propia y creando un despacho individual, así puedes ser abogado penalista en Madrid e irte abriendo paso entre la competencia. Otra fórmula más aconsejable es formar parte de un despacho de abogados. El abogado multidisciplinar cada vez se busca menos entre los clientes, se busca la especialidad para solucionar los casos. Así, si formas parte de un despacho de abogados, podrás ejercer como abogado penalista dentro de ese despacho y todas aquellas personas que lleguen con algún relacionado con el Derecho Penal, serás tú quien les atienda.
También puedes trabajar en una empresa como abogado. Contratan tus servicios o formas parte de su plantilla por si surge algún problema legal. En estos casos no solo actúas de abogado sino también de asesor. En estos casos, se intenta o se busca que se tomen medidas e implantar procedimientos para evitar que se cometan infracciones o delitos.
Funciones principales
Un abogado penalista dentro de un proceso puede representar a la parte acusada o al denunciante/ofendido. El abogado desarrolla sus funciones ante los juzgados y tribunales de lo penal ya que son los competentes en este tipo de procedimientos. También asiste en las comisarías de policía al detenido en su primera declaración y ante el juez en la declaración de su cliente como persona investigada.
Se encarga de definir las estrategias tanto de defensa como de acusación, dependiendo de quién sea su cliente. La postura que se va a adoptar en cada caso y como hemos indicado anteriormente, ofrecerá asesoramiento privado a sus clientes tanto a empresa como a particulares para evitar riesgos de delitos penales.
Con lo cual, tanto si el cliente decide interponer una denuncia como si ya se encuentra inmerso en un procedimiento penal, el abogado penalista le asesorará y le guiará durante todo el proceso para defender sus intereses y derechos ante el juez. Y velará porque haya un proceso justo y con todas las garantías.
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